Logo es.decormyyhome.com

Cómo elegir un lavavajillas

Cómo elegir un lavavajillas
Cómo elegir un lavavajillas

Vídeo: ¿Qué LAVAVAJILLAS ELEGIR? | TIPOS de LAVAVAJILLAS 2024, Julio

Vídeo: ¿Qué LAVAVAJILLAS ELEGIR? | TIPOS de LAVAVAJILLAS 2024, Julio
Anonim

Los lavaplatos son una verdadera salvación para aquellos que no están acostumbrados a pasar la mayor parte de su tiempo libre en la tarea, liberándolos de los procedimientos que no les gustan tanto. Además, esta técnica hace frente a esta tarea mucho mejor, lavando incluso los platos más sucios, lavando completamente el detergente y secando los platos, tazas, sartenes, etc.

Image

Antes de comprar un lavavajillas, debe decidir sus dimensiones. Pregúntese dónde lo puso y cuántos platos sucios planea cargar en él. Los fabricantes ofrecen lavavajillas estrechos, grandes y de sobremesa. Los dos primeros tipos de máquinas pueden integrarse en una sola línea con equipos de cocina, pero la computadora de escritorio, debido a su tamaño relativamente modesto, puede instalarse fácilmente en una mesa, integrada en un armario de pared de cocina.

Antes de comprar este electrodoméstico, preste atención a la canasta para los platos: la conveniencia de operar un electrodoméstico dependerá mucho de su diseño. Si la cesta tiene ajuste de altura y soportes extraíbles o plegables, esto aumentará significativamente la comodidad de uso.

Uno de los indicadores más importantes de la calidad de un lavavajillas es la calidad del lavado de los platos, que está marcado con las letras latinas A, B, C, B y E. Todo es muy simple: cuanto mayor sea la clase del lavavajillas, mejor será el proceso de lavado, pero el precio de tal El modelo será apropiado. La calidad del lavado de platos también se ve afectada por la cantidad de boquillas a través de las cuales se suministra y rocía agua. Cuanto más haya, y cuanto más estrecha sea la apertura del aspersor, mejor se lavarán los platos sucios.

Un indicador importante al que se debe prestar atención son las características del modo de secado. En lavavajillas hay varias opciones. Con el método de condensación, el secado se realiza por condensación de humedad en las paredes frías de la máquina, y los platos se secan sin usar electricidad. Más efectivo es el secado, que ocurre debido a la acumulación de calor que se libera durante el proceso de lavado. En este caso, los platos limpios salen casi sin rayas. La clase de secado más alta, A, se logra debido al suministro forzado de aire caliente a los platos mediante un ventilador.

Al comprar un lavavajillas, debe guiarse por la rentabilidad del modelo que le gusta. Esta característica está determinada por dos factores: el consumo de electricidad y agua. Cuanta menos agua consume un lavavajillas durante el funcionamiento, menos energía y detergente se consume. Las máquinas de clase A consumen una cantidad mínima de agua para cada sesión de lavado, pero las máquinas de clase F y G consumen significativamente más.